Georgia en autostop
Cuando cruzamos la frontera terrestre entre Turquía y Georgia en Sarp, tras casi 20 horas concatenadas de transportes, nos sentimos un poco desorientados. Por un lado, el mar Negro, esa gigante masa de agua salada -solo renovada con el Mediterráneo a través del finísimo estrecho de Bósforo-, reposa tranquila, sin apenas mecerse, con un color…